26 Ene CLASSIC BLUE, COLOR PANTONE 2020

Pantone ya anunció que el color del año 2020 es el CLASSIC BLUE, un azul con reminiscencias de un sereno atardecer. Laurie Pressman, vicepresidenta del Pantone Color Institute, está involucrada desde hace más de 20 años en el desarrollo de la investigación del color y sus tendencias en el mercado de la moda y el hogar.

El color es, sin dudad,  la herramienta más poderosa de comunicación para influir en la toma de decisiones de compra de los consumidores y en la gestión de las marcas para incentivar las ventas. Este año se ha decantado por un color que ofrece estabilidad, confianza y conexión en una nueva década donde el mundo parece fracturado.

«es un color que anticipa lo que sucederá después. ¿qué nos deparará el futuro a media que avanzamos en las horas de la tarde?»

El color del año se decide tras un largo y meditado proceso que tiene en cuenta el estilo de vida y las tendencias de la industria del momento. Porque las tendencias que vemos en el color son reflejo de macro tendencias que tienen lugar en la cultura. Las influencias en el color pueden venir del are, cine, estilo de vida, entornos políticos y socioeconómicos, destinos de viajes, tecnología…

El nombre del color es un factor importante. AZUL CLÁSICO evoca un inicio prometedor a un ya finalizado 2019, una contemplación donde se encuentran el cielo y el mar. ¿Verdad que no es lo mismo llamar a un color «marrón sucio» frente a «chocolate tostado»? Nos lleva a dos pensamientos diferentes, por eso en el nombre debe estar implícito el mensaje.

Fiel a su nombre, CLASSIC BLUE es sobrio, noble, ilimitado, arriesgado.

«el nombre del color sí que importa. el mensaje debe estar implícito.»

Incorporar el color en tu estilo de vida puede ser tan simple como añadir comidas azules a tu dieta. Alineado con el creciente énfasis en la salud, alimentos y bebidas que son similares al color Azul Clásico son ricas en antocianinas que refuerzan la defensa del cuerpo contra enfermedades cardiovasculares o células cancerígenas.

Aunque un caprichito de vez en cuando tampoco viene mal.. ¡A disfrutar!